¿Say What Now? #6: ¡¿Quién Otorga Los Derechos?!

Peach People Hayley Mills y Natalie Akers explican cómo orientar una campaña a través de las potencialmente turbias aguas de los derechos y permisos, y por qué el Covid-19 está volviendo más valioso que nunca el asesoramiento experto.

11 septiembre 2020

No dejar nada a la suerte. 

Desde que tenemos memoria, éstas han sido las palabras por las cuales regirse cuando se trata de derechos y permisos – y por buenas razones. A través de los años, hemos visto campañas tropezarse de las más ridículas (y costosas) maneras, pudiendo todas ser tan evitable.

Algunos de los problemas de derechos y permisos más impredecibles y francamente descabellados que han estado causando problemas a los publicistas incluyen (no en exclusiva)): 

  • "All Shook Up": Si quieres incluir un imitador de Elvis Presley en tu anuncio, debes conseguir un permiso de la entidad que administra su patrimonio. Afortunadamente, todavía se reúnen una vez al mes para discutir precisamente estos temas.
  • Un Ojo por una Eiffel: Si quieres usar una imagen de la Torre Eiffel de día, no hay problema. Pero si quieres usar una imagen o filmación de la Torre Eiffel de noche, deberás conseguir permiso del fabricante de productos electrónicos Phillips, que es el propietario de todas las bombillas que iluminan el famoso monumento de noche. 
  • Imagen Pera-fecta: Estando en Francia, debes tener cuidado si quieres incluir una fuente con fruta en tu anuncio. Tendrás que asegurarte de que la fuente aparezca sobre una mesa de comedor y en ninguna otra superficie o habitación de la casa (incluyendo la cocina). Por lo que entendemos, esto es para promover un estilo de vida saludable.
  • Me Pinto, Luego Existo: Algo que ha estado obstaculizando más y más campañas son los actores con tatuajes. El hecho que a muchas personas les guste tatuarse motivos con propiedad intelectual (el escudo de un equipo de fútbol o la portada de un disco, por ejemplo), está causando muchos dolores de cabeza a la hora de obtener los derechos de redistribución de estas imágenes.
  • Perro Que Ladra…: Si estás planeando usar un perro disfrazado en tu anuncio en el Reino Unido, tendrás que poder demostrar que el disfraz del perro fue adquirido en una tienda para mascotas.

Claramente, el mundo de los derechos y permisos está plagado de todo tipo de dificultades y riesgos que no se le ocurrirían naturalmente a nadie durante las etapas iniciales de guion o planificación de una campaña. Es prácticamente imposible estar consciente de todos los problemas que pueden surgir, y cualquiera que no viva y respire regulaciones no tiene por qué estar al tanto de todo. A pesar de que los ejemplos mencionados arriba son algunos de los más curiosos, los ejemplos más comunes y frustrantes tienden a ser bastante mundanos.

Por ejemplo, ¿aparece un automóvil en la pantalla en algún momento de tu anuncio? Si es así, será mejor asegurarse de que éste esté en buenas condiciones, de lo contrario, podrías verte en la obligación de conseguir un permiso por parte del fabricante. ¿Estás haciendo un aviso de Navidad? Deberás tomar en cuenta la ley del Reino Unido que prohíbe las canciones religiosas en los anuncios, y escoger un villancico navideño adecuadamente. ¿Va a participar un animal en el set? Asegúrate de contar con una carta firmada por un veterinario calificado para certificar que no sufrió daños durante ninguna etapa de la producción. La lista es larga.

Y para aumentar aún más la presión, el organismo regulador de publicidad del Reino Unido, ClearCast, no será responsable de ningún problema en materia de derechos que pudiese surgir. Si se comete un costoso error en materia de derechos, los anunciantes deberán correr con todas las consecuencias. 

Complicaciones Covid 

Todo lo anterior, hacía que lograr que un anuncio fuera aprobado por los organismos reguladores sin ningún problema de derechos ya fuese un potencial campo minado mucho antes de que el Coronavirus nos lanzara al caos. La pandemia ha complicado aún más las cosas, con una serie de nuevas reglas y regulaciones con las cuales lidiar.

Por ejemplo, en algunos casos, los niños actores necesitarán una carta de declaración extra por parte de sus padres. Un anuncio en el que participamos recientemente incluía niños actores y un perro. Adicionalmente a lo previsto, tuvimos que conseguir un certificado veterinario que corroboraba que el perro no tenía Covid, junto con contar con la presencia de un entrenador canino profesional y el dueño del perro en el set, quienes también debieron ser evaluados médicamente. 

En resumen, es mucho más seguro hablar con los expertos antes de empezar a trabajar en cualquier campaña. En Peach People ayudamos a las empresas con las tareas admin (administrativas) en torno a los anuncios en video, pudiendo participar desde las primeras etapas de una campaña, para que todos los involucrados sepan qué terreno pisan antes de que estos obstáculos tengan siquiera la posibilidad de aparecer.

A pesar de ser éste un mundo en constante cambio, el viejo consejo parece más acertado que nunca. ¿Por qué dejar algo a la suerte? 

Categorised as: